R es algo peculiar. Intenta pasárselo bien, pero es demasiado sensible y a veces se entristece. Tampoco ayuda que esté muerto, o casi muerto. Se pasa los días vagando por el aeropuerto abandonado donde vive sin saber muy bien qué sentido tiene su existencia. Hasta que conoce a Julie.
Estoy muerto, pero no está tan mal. He aprendido a vivir con ello. Siento no poder presentarme como es debido, pero ya no tengo nombre. Casi ninguno de nosotros lo tiene. Los perdemos como las llaves del coche, nos olvidamos de ellos como quien olvida los cumpleaños. Es posible que mi nombre empezara por R, pero esa R es lo único que me queda. Tiene gracia, porque cuando estaba vivo siempre me olvidaba de los nombres. Mi amigo M dice que lo irónico de ser un zombi es que todo tiene gracia, pero no puedes sonreír porque se te han podrido los labios.
Con ese párrafo empieza este gran libro que me ha enseñado algo muy importante: no juzgues algo sin probarlo porque puede que te estés perdiendo algo grande. No voy a decir que sea uno de los mejores libros que he leído, no lo es, y estos nuevos zombis me han desconcertado durante toda la lectura, pero aún así me he prendado de cada una de sus páginas y me he acostumbrado a ellos aunque ni si quiera ahora pueda entenderlos.
Y lo que más destacaría, que es lo que me ha fascinado y enamorado, es la novedad que representa esta lectura, las sorpresas que trae consigo, todo es nuevo y cautivador, además de la genial manera que tiene el autor de ponerse en la piel de R y de mostrarnos sus pensamientos, sus emociones, sus cavilaciones, todo sobre él y sobre el mundo que le rodea que parece estar muriendo lentamente junto con la esperanza de los poco vivos que quedan. Es fascinante poder conocer y contemplar el fin del mundo desde el punto de vista de uno de los zombis que está causándolo, que un zombi pueda contarnos su historia e incluso simplemente que tenga una historia que contar.
Y todo ello sin adornos, mostrándonos su realidad tal como es, a veces de una forma poética y hermosa pero otras resaltando la crudeza y crueldad del mundo en el que viven. Te trasmite la angustia y agonía, tanto de los zombis como de los humanos, muy vivamente y les comprendes, les compadeces e incluso eres capaz de perdonarles sus pecados, porque, como dicen ellos: la culpable de todo es la plaga que está arrasando su mundo y sus vidas.
El mundo en el que viven los humanos vivos que quedan está muy desmoralizado, con el paso del tiempo pierden la esperanza, todos viven en un gran estadio de futbol protegidos por murallas y salir fuera pondría en peligro sus vidas, dentro la vida se va apagando, casi no queda alegría ni risas, todo es más apagado y más gris, monótono. Ya lo único que importa es la supervivencia y con tal de sobrevivir, como cuesta tanto, han olvidado otras cosas. En las escuelas se enseña a matar y a utilizar armas, algo que me ha sorprendido ver como enfrentan a niños con zombis para enseñarles a matarlos. Cada vez queda menos gente viva y hay más zombis, la fe se está desvaneciendo y parece casi imposible encontrar una cura que salve a la humanidad. Allí vive Julie con su novio Perry, él se ha alistado en el ejército de Citi Estadio y en su primera expedición fuera de los muros Julie se ha apuntado para acompañarle.
El mundo en el que viven los zombis solo importa una cosa: alimentarse. El grupo de zombis que conoceremos viven en un aeropuerto abandonado, se concentran en grupos que conviven juntos y cuando hay necesidad de alimentarse una partida de caza sale hacia la ciudad para coger humanos, ellos se alimentan y les llevan los restos a los que no pueden salir por las razones que sean. R es uno de esos zombis, pero él es diferente del resto e incluso sus compañeros lo notan, su mente trabaja con dificultad pero aún queda algo allí dentro y él sabe que lo que hacen no está bien, pero no conoce otra manera de sobrevivir. No recuerda nada de su pasado, ni si quiera su nombre, ni cómo llegó el fin del mundo y de la vida, solo sabe que está muerto y que para seguir existiendo tiene que matar y comerse a los vivos, y aunque no le gusta no puede resistirse y menos a sus jugosos cerebros, a través de ellos puede vislumbrar unos segundos de vida, de recuerdos prestados, y merece la pena.
Personajes principales ::
Zombis :: R el protagonista narrador y M su mejor amigo.
Humanos:: Julie la protagonista y Nora su mejor amiga. Además de Perry, su novio que muere pero una parte de él se queda dentro de R por lo que podremos conocerle.
La tarde en la que Julie y su novio salen de expedición con un grupo de compañeros otros grupo de zombis sale de caza para alimentarse, los zombis les huelen al acercarse a la ciudad y van tras ellos, les encuentran y les atacan, a R le perturba tantos gritos, el miedo de los vivos y su angustia, las armas disparando, pero no puede contenerse, tiene tanta hambre... y ataca a Perry y se come su cerebro, por ello pasa algo que podría tacharse de milagro, R absorbe los recuerdos, sentimientos y pensamientos de Perry, tal vez incluso su alma, y reconoce a Julie entre la multitud y justo cuando un zombi va a atacarla la protege y se la lleva con él para mantenerla a salvo. Así es como empieza su historia juntos.
Al principio Julie desconfiará de R, obviamente, pero con el paso de los días, como no tiene muchas más opciones que quedarse con él hasta que pueda volver al estadio sin correr mucho peligro, se va dando cuenta de que él es distinto y se interesa por él, hablan y pasan tiempo juntos, ella intenta saber qué es R y qué es lo que está cambiándole tan rápido, y con el tiempo ella acaba confiando y se hacen amigos, será muy interesante e innovador ver ese proceso, como se conocen y comparten historias, recuerdos, esperanzas... y cómo empiezan a cobrar importancia el uno para el otro incluso sin que ellos se den cuenta en el momento, y sobre todo como R evoluciona y cada vez tiene más conciencia propia. No me cansaré de decir que R es un personaje fascinante que te cautiva y es imposible no quererle, es lo mejor del libro.
R y Julie es una historia de amor, pero sobretodo es una historia de amistad, de confianza, y lo más importante: de esperanza, de fe en un futuro mejor, en la salvación de la humanidad e incluso de los zombis, y eso es lo que representan la pareja tan extraña que forman R y Julie, futuro y esperanza. Y lo que más me ha gustado de la historia de amor es que pasa por todas las fases, primero se conocen y aprenden a confiar el uno en el otro, luego se hacen amigos, después se extrañan cuando no están juntos, más tarde llega la ternura y por último el amor, un amor profundo y muy bonito.
Y por su puesto también hay acción porque hay unos monstruos muy malos que les pondrán las cosas muy difíciles en dos ocasiones a nuestra pareja y habrá una gran lucha al final contra estas cosas a las que llaman “los huesudos”. Dan mucho miedo y repelús.
La verdad es que el libro tiene de todo, es muy completo, y podría pasarme horas hablando sobre él pero no voy a hacerlo, me voy a dejar muchas cosas en el tintero en esta reseña porque si lo cuento todo entonces no tendría tanta gracia leerlo, y hasta creo que ya he contado demasiado... porque lo que más me ha gustado es que no sabía qué iba a encontrarme entre sus páginas y a cada instante me sorprendía y ocurría algo que no me esperaba y eso ha sido genial, me ha hecho disfrutar mucho.
Por último voy a decir lo que NO me ha gustado, porque la perfección no existe (casi nunca). Y eso que criticaría sería el final. No voy a criticar el que en el libro haya millones de preguntas: Cómo se creo la plaga de zombis, cuál fue el principio de todo, qué son los Huesudos, por qué los zombis pueden pensar aunque sea un poco e incluso comunicarse entre ellos y organizarse pero no tienen ningún recuerdo de su vida humana, cómo es que pueden sentir los recuerdos de otra persona cuando se comen su cerebro, qué es lo que le pasa a R y...... muchas preguntas y ninguna respuesta, no hay ni una sola respuesta a toda la historia que nos cuenta, no hay un por qué ni un principio, y me ha picado mucho el no saber esas cosas, pero bueno... lo que voy a criticar es el final de la historia, cómo termina R y el futuro que ello conlleva, no me ha gustado nada ese final y creo que ha sido una gran cagada que R termine así ¡y encima sin ningún motivo! Y lo que le pasa a Julie todavía sigo sin entenderlo. No tiene ni pies ni cabeza, porque como no nos dan ni una sola respuesta a nada pues las cosas pasan y punto te las comes, te las crees y no tienes más opciones. Eso me ha molestado muchísimo. Y por esta razón es que no voy a darle la nota máxima, si no fuera por ese final la tendría y muy merecida.
Spoiler para aclarar, no lo leas si no has terminado el libro::
Si que me ha gustado que los zombis puedan curarse e incluso que los acepten, cuando mejoran, en el estadio y se junten con los humanos, que los zombis puedan curarse recobrando la conciencia es como debería haber sido, que mentalmente vuelvan a ser humanos, ¡no que puedan convertirse en humanos vivos otra vez! Que R termine así, que le pase eso, me ha parecido incluso en una novela de ficción demasiado fantasioso, y el cambio de Julie al besar a R y contagiarse sigo sin entenderlo y es totalmente ilógico, vamos que eso que les pasa a los dos no me ha gustado nada de nada, me parece un sin sentido, cuando creas algo así tienes que darle una explicación, un motivo de por qué sucede, no simplemente que pase y punto.
PUNTUACIÓN :: 4